Poema de William Shakespeare


Cuando hombres y Fortuna me abandonan,
lloro en la soledad de mi destierro,
y al cielo sordo con mis quejas canso
y maldigo al mirar mi desventura.
Soñando ser más rico de esperanza,
bello como éste, como aquél rodeado,
deseando el arte de uno, el poder de otro,
insatisfecho con lo que me queda.
A pesar de que casi me desprecio,
pienso en ti y soy feliz y mi alma entonces,
como al amanecer la alondra, se alza
de la tierra sombría y canta al cielo:
pues recordar tu amor es tal fortuna
que no cambio mi estado por un reino.
Vídeo/poema: De Julieta a Romeo.
Lo más importante no es lo que me sucede, sino lo que hago al respecto.
“Vencido
y traicionado, viendo con cinismo que ya no me pueden quietar más nada”, en el
fondo del pozo pienso en ti y aunque
estemos solos en este mundo violento y frio, tu amor me eleva, es el calor de
la fogata en la noche del desierto, es
la causa que mi vida tenga sentido, porque nuestro amor fue probado contra toda
clase de tormentas y prevalece aún más
fuerte.
Hermoso.
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